Día uno: Del primer día no puedo decir mucho ya que fue el viaje de ida. 6 horas en un tren (1 para ir a Murcia centro para coger el tren que me llevaría hasta allí después de 5h c:). No tengo gran cosa que decir de ese día, solo que tenía mucho sueño y la mujer que tenía al lado era algo rarilla, hasta me aprendí su mini rutina: *Lee* *para y busca en su bolsa su botella *bebe* *la vuelve a guardar y sigue leyendo* *para de nuevo y saca un bocadillo* *le da tres mordiscos, lo guarda y sigue leyendo* *vuelve a parar para sacar el agua* *sigue leyendo* *para y continúa el mini bocadillo* *ahora mira la película*. Así seguido, creo que se comió el bocadillo después de repetir 5 o 6 veces lo mismo. Me hacía gracia porque para sacar el agua tenía que levantarse. Ah, hasta se tomaba unas pastillas. Se notaba que era una mujer de negocios, lo tenía todo controlado.
Cuando estaba en el tren no fui al baño ni una sola vez (pensaréis ``ah, pues vale...¿por qué me cuentas eso?). Veréis, al llegar a Atocha, aún me quedaban 2h de metro hasta la casa de la señorita esta (algo que yo no sabía xdd) otra cosa que ni ella ni yo sabíamos (a mi no me culpéis, nunca me he montado en un metro) es que ahí había baños. Estuvimos buscando por toda la estación hasta encontrar uno en el que...¡Había que pagar! ¡Por usar el puto váter! ¡60 putos céntimos! Encima el baño era una mierda xd.
Día dos: Una de las cosas que más me gustan de las ciudades grandes es la cantidad de gente que te encuentras de todo tipo, y las competencias que se marcan un restaurante y otro para que vayas a comer en el suyo. Es más, se pelearon un peruano y un turco para que fuéramos a comer a sus respectivos restaurantes. Obviamente no elegí ninguno de los dos, me fue disimuladamente, solo por si a caso (?). Una de las cosas que se han vuelto tradición es ir al menos 2 veces al fnac. Eso si, si vais a comprarle un regalo allí a alguien que va con vosotros, no le preguntéis a las que trabajan ahí. Otra de las cosas que me gustan de las ciudades y que va englobado a lo primero que he dicho, son los artistas callejeros. Es entretenido, aunque sea un fraude. Y al fin, conocí en persona a @Noto_Yamato (Kali), la cual se convirtió en nuestra guía y nos enseñó pequeños sitios interesantes.
Por cierto, no entiendo el arte moderno. Peeero es guay ir a uno, acercarte cuando la gente se pare sobre el cuadro en blanco y empezar ``oh, aquí vemos una gran representación de la vida. De cómo la vida misma la vamos pintando mientras vamos caminando, de que es un papel en blanco que debemos llenar. ¡Que no está predestinada y somos libres de ella!´´
Día tres: Picnic en el retiro a las 5 de la tarde entre dos señoras dándose el lote y un grupo de yoga es guay. Aunque los pájaros parezcan atacarte. Nunca os fiéis de ellos, son malvados. Una cosa curiosa que vi en la cola para montarte en las barcas era a un grupo de británicos intentando decirle a un hindú lo que costaban. Lo curioso es que la chica británica intentaba explicárselo en español. No se si el hindú no sabía inglés o si ella pensaba que era español, fue una situación rayante pero me hizo gracia. Y sobre las barcas he de decir:
1. ¿Sabéis lo que es toparte contra una pareja de asiáticos y su hija inglesa? Pues imaginaos 4 veces. ``Oh, hola otla vez.´´ Y luego que la hija esté a punto de caerse al agua por tu culpa y huir.
2. No os acerquéis a las boyas de coña. Se enganchan y te persiguen. Ah, y vuelves a toparte con la familia asiática.
3. El señor de la barca que pita cuando cometes una infracción me cae mal. Solo quería acercarme a la fuente para echarme agua.
4. No te preocupes por lo anterior. Tú decide echarte una carrera con dos tíos extranjeros que quieren hacerse los chulos. Gana y conseguirás un baño gratis. No, en serio, cabrones.
Después tocó quedar con @Hero0fHope (AAAANNN) y el señor Alexander. También iba a venir Al pero al final no pudo y ;W; algún día. ¿Sabéis? Una de las cosas que me molesta es la gente que pasa de los músicos callejeros. Es gracioso porque alguna gente les echa una monedita y pasan de largo. Aunque sea una vez, os invito a que os quedéis a escucharlos y cuando acaben aplaudís, porque se lo merecen.
Día cuatro: Y vuelven otras 5h en tren. Aunque esta vez fue más tranquilo ya que iba en una mesa de 4 con dos estudiantes. Uno estaba viendo una película en la tablet y yo intentaba mirar por encima a ver cual era xDD.
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